Open Banking y APIs: qué son y cómo están cambiando las finanzas

Open Banking es un modelo financiero que permite que instituciones bancarias y proveedores de servicios financieros compartan datos de clientes con terceros autorizados a través de interfaces de programación de aplicaciones (APIs). Este enfoque revoluciona la forma en que se accede a la información financiera al democratizar el acceso a datos que históricamente estaban confinados dentro de las bóvedas de las instituciones bancarias tradicionales.​

Una API (Interfaz de Programación de Aplicaciones) es, en términos simples, un software que actúa como puente permitiendo que dos aplicaciones o sistemas se comuniquen entre sí. En el contexto de Open Banking, estas APIs son la infraestructura tecnológica fundamental que facilita el intercambio seguro de información financiera entre bancos y empresas fintech, así como la iniciación de pagos de manera automatizada.​

La estructura de Open Banking se organiza en tres tipos principales de APIs:​

  • APIs de datos: Proporcionan acceso de solo lectura a información de cuentas, saldos e historial de transacciones.
  • APIs de transacciones: Permiten transferencias de fondos, débitos directos y servicios de pago.
  • APIs de productos: Permiten listar productos financieros, tasas y términos, siendo útiles para plataformas comparativas.

El mecanismo de funcionamiento

El proceso de Open Banking se fundamenta en el consentimiento informado del cliente. Cuando un usuario desea utilizar un servicio financiero a través de una plataforma tercera, explícitamente autoriza a esa plataforma a acceder a sus datos bancarios a través de APIs seguras. Este consentimiento es verificable y puede ser revocado en cualquier momento, otorgando al consumidor control total sobre su información.​

Una vez autorizado, el sistema utiliza protocolos de seguridad robustos como OAuth 2.0 y OpenID Connect para garantizar que la transmisión de datos sea segura y que solo se compartan los datos específicos solicitados. Los terceros autorizados, conocidos como TPP (Third-Party Providers), pueden entonces analizar y procesar esta información para ofrecer servicios mejorados.​

Impacto transformador en la industria financiera

Democratización del acceso y reducción de barreras de entrada

Una de las transformaciones más significativas de Open Banking es cómo ha derribado las barreras de entrada para nuevos actores en el ecosistema financiero. Las empresas fintech y proveedores de tecnología ya no necesitan construir toda su infraestructura desde cero o mantener relaciones exclusivas con grandes bancos. Simplemente pueden acceder a datos bancarios autorizados y crear servicios innovadores construidos sobre esa información.​

Esto ha nivelado el campo de juego competitivo, permitiendo que startups con soluciones tecnológicas ágiles compitan directamente con instituciones financieras establecimientos que llevan décadas en el mercado. Como resultado, los consumidores tienen acceso a una gama significativamente más amplia de productos financieros, a menudo con mejores tasas de interés, comisiones más bajas y características innovadoras.​

Mejora radical de la experiencia del cliente

Open Banking ha permitido la creación de servicios hiperPersonalizados diseñados específicamente alrededor de los patrones de comportamiento financiero individual de cada cliente. Las aplicaciones de agregación de cuentas, por ejemplo, pueden consolidar múltiples cuentas bancarias en una única plataforma, proporcionando a los usuarios una vista completa y unificada de sus finanzas.​

Aplicaciones de presupuesto y análisis de gastos pueden acceder a datos transaccionales históricos y proyectar patrones de gasto futuro, ofreciendo recomendaciones personalizadas sobre ahorros e inversiones. Algunos servicios, como Plum, utilizan inteligencia artificial para analizar patrones de flujo de caja y automáticamente invertir en productos de ahorro o inversión alineados con el perfil de riesgo del usuario.​

Incremento sustancial de la competencia

Open Banking ha intensificado significativamente la competencia en el sector financiero, impulsando tanto a instituciones tradicionales como a nuevos entrantes a innovar constantemente. Sin acceso a datos de clientes multibancos, las entidades financieras previamente generaban barreras para la entrada de nuevas empresas tecnológicas y generaban dificultades para que los clientes compararan tarifas entre proveedores.​

Hoy, esta transparencia y accesibilidad de datos han permitido el surgimiento de plataformas comparativas donde los consumidores pueden evaluar ofertas de crédito, seguros e inversiones de múltiples proveedores simultáneamente, seleccionando las opciones más convenientes para sus necesidades específicas.​

Casos de uso prácticos y aplicaciones reales

Verificación de ingresos y evaluación de crédito

Open Banking ha revolucionado procesos que tradicionalmente eran lentos y engorrosos. Prestamistas pueden ahora verificar ingresos de solicitantes analizando directamente sus registros bancarios autenticados, acelerando significativamente los tiempos de aprobación de préstamos, acuerdos de arrendamiento y otras transacciones que requieren verificación de ingresos.​

El impacto en la calidad de las decisiones de crédito es particularmente notable. Al tener acceso a patrones de gasto históricos, saldos de cuentas y comportamiento transaccional completo, los prestamistas pueden desarrollar modelos de evaluación de riesgo crediticio más precisos. Los datos demuestran que los préstamos otorgados utilizando datos de Open Banking tienen un rendimiento hasta 50% mejor que otros préstamos, una mejora sustancial en la predicción del comportamiento del deudor.​

Automatización de procesos contables y de reconciliación

Para contadores, agencias de contabilidad y empresas que deben reconciliar pagos, Open Banking ha eliminado tareas manuales altamente propensas a errores. Plataformas de contabilidad como Dougs, que utiliza agregación de datos de Powens, pueden recuperar automáticamente transacciones de múltiples cuentas bancarias y de inversión, reconciliarlas contra registros de cuentas por cobrar y cuentas por pagar, y generar estados financieros con mínima intervención manual.​

El resultado es dramático: las empresas que utilizan estas soluciones procesan seis veces más balances de comprobación al año comparado con métodos tradicionales, mejorando significativamente la productividad de equipos contables.​

Pagos directos entre cuentas y soluciones de pago

Los pagos A2A (Account-to-Account) representan una categoría de transacciones en rápido crecimiento donde el dinero se mueve directamente entre dos cuentas bancarias sin pasar por redes de tarjetas de crédito intermediarias. Estas transacciones son más rápidas, a menudo con liquidación en tiempo real, y generalmente tienen comisiones más bajas que los métodos tradicionales de pago.​

Plataformas de gestión de propiedades en alquiler pueden usar Open Banking para recopilar automáticamente pagos de renta de múltiples fuentes, facilitando el pago directo desde cuentas bancarias de inquilinos. Estudios muestran que estas soluciones han ayudado a reducir tasas de impago de renta hasta en un 30%, mejorando significativamente los flujos de efectivo para administradores de propiedades.​

Financiamiento integrado en ecosistemas no financieros

Uno de los desarrollos más interesantes es embedded finance (finanzas integradas), donde servicios de pago y crédito se incorporan dentro de plataformas de e-commerce, mercados de viajes, y otras plataformas no financieras. Por ejemplo, Shopify permite que sus vendedores accedan a soluciones de capital y gestión de pagos directamente dentro de su plataforma, facilitado por APIs de Open Banking que conectan datos financieros del negocio con proveedores de capital.​

El panorama regulatorio: De PSD2 a PSD3

Evolución regulatoria en Europa

El desarrollo de Open Banking ha sido impulsado por marcos regulatorios que reconocen tanto sus beneficios como sus riesgos. La Directiva de Servicios de Pago 2 (PSD2), implementada en Europa en 2018, fue revolucionaria al exigir que los bancos proporcionaran acceso a APIs a terceros autorizados y establecer estándares de seguridad y cumplimiento.​

Sin embargo, después de cinco años de experiencia práctica, la regulación ha evolucionado. La Directiva de Servicios de Pago 3 (PSD3) y su correspondiente Regulación de Servicios de Pago (PSR), recientemente propuestas, refinan y fortalecen el marco regulatorio.​

Los cambios clave en PSD3 incluyen:​

  • Autenticación de cliente más flexible: Mientras que PSD2 requería autenticación con factores de dos categorías diferentes (conocimiento, posesión, herencia), PSD3 permite dos factores de la misma categoría, como biometría más PIN.
  • Dashboards de control de datos para consumidores: Los bancos deben implementar paneles que permitan a clientes monitorear y revocar acceso de terceros a sus datos en cualquier momento.
  • Requisitos más estrictos de API: Los bancos deben mantener APIs que cumplan con estándares de rendimiento publicados trimestralmente, eliminando barreras injustificadas al acceso de datos.
  • Protección mejorada contra fraude: PSD3 introduce nuevas políticas de compartición de datos bajo GDPR que permiten a los proveedores de servicios de pago procesar datos de transacciones para detección de fraude sin requerir consentimiento explícito del consumidor.

Open Banking y Open Finance en América Latina

América Latina está adoptando estrategias de Open Banking adaptadas a contextos locales, con diferentes países en diferentes estadios de madurez regulatoria y de implementación.​

Brasil continúa siendo el líder regional indiscutible. Su framework de Open Finance, regulado por el Banco Central desde 2021, es ahora uno de los ecosistemas más maduros globalmente. Para 2024, Brasil había integrado más de 800 instituciones financieras en su ecosistema, registrando 61.9 millones de consentimientos activos (un aumento de 45% respecto a 2023) y 102 mil millones de llamadas API (aumento de 96% respecto a 2023). Particularmente destacable es el crecimiento de pagos iniciados por terceros (PIS), que aumentaron 194% en un año.​

Lo que distingue a Brasil es su enfoque integral. Más allá de Open Banking tradicional (acceso a datos bancarios), ha expandido el ecosistema para incluir Open Insurance (datos de seguros), Open Investments (datos de inversiones), y Open Pensions (datos de pensiones), creando una verdadera economía de datos financieros compartidos.​

Chile implementó Open Banking a través de su Ley Fintech en enero 2023, seguida por la regulación formal (Norma General No. 514 de la Comisión para el Mercado Financiero) en julio 2024. La implementación se llevará a cabo en fases: un período de preparación de 24 meses (desde julio 2024) seguido de despliegue gradual comenzando en julio 2026.​

Colombia está avanzando rápidamente hacia la obligatoriedad de Open Finance tras años de marcos regulatorios preliminares desde 2019. El país espera ingresar en su fase transformadora durante 2025-2026.​

Perú ha dado pasos deliberados pero significativos. El Banco Central de Perú (BCRP) ha adoptado un enfoque regulado por el regulador, enfocándose en ciberseguridad, privacidad de datos, y comenzando con entidades bancarias. Asociaciones estratégicas, como la colaboración del BCRP con el NPCI de India para desarrollar una plataforma de pagos en tiempo real, están fortaleciendo la infraestructura digital necesaria para una adopción más amplia de Open Finance. Para 2025-2026, se espera un marco regulatorio formal que impulse significativamente la inclusión financiera.​

México está experimentando un renovado momentum después de años de regulación en construcción, con nuevos participantes fintech ingresando al mercado e instituciones financieras preparando su infraestructura de APIs.​

Países como GuatemalaUruguay se están perfilando como polos emergentes de innovación en Open Finance durante 2025-2026.​

Desafíos críticos y consideraciones de seguridad

Ciberseguridad y gestión de riesgos

El mayor riesgo inherente a Open Banking es que abre múltiples puntos de acceso a datos financieros sensibles. Cada API que se expone representa una potencial superficie de ataque para hackers. Las estadísticas muestran que uno de cada 13 incidentes cibernéticos está relacionado con inseguridad de APIs, representando un fallo de seguridad crítico que todas las instituciones financieras deben abordar.​

Los riesgos específicos incluyen:​

  • Filtración de datos: Las APIs conectan directamente a bases de datos financieras; si no están adecuadamente protegidas, pueden exponerse datos confidenciales de clientes.
  • Fraude facilitado: Acceso no autorizado a datos de transacciones puede permitir fraude sofisticado o suplantación de identidad.
  • Ataques a terceros: Si una empresa fintech con acceso a APIs bancarias es comprometida, los datos de los clientes del banco pueden ser expuestos.

Para mitigar estos riesgos, las instituciones deben:​

  • Establecer políticas de seguridad comunes y estandarizadas para cómo se crean, despliegan y consumen las APIs.
  • Garantizar visibilidad completa de todas las APIs en todos los entornos de producción.
  • Implementar detección de anomalías en tiempo real para patrones transaccionales inusuales.
  • Aplicar encriptación y pseudonimización de datos sensibles.
  • Realizar auditorías regulares de acceso y uso de APIs.

Fragmentación regulatoria y complejidad de cumplimiento

Mientras que Europa ha establecido marcos unificados (PSD2/PSD3), la fragmentación regulatoria en América Latina presenta desafíos significativos. Cada país tiene requisitos ligeramente diferentes, estándares de APIs divergentes, y procesos de aprobación distintos. Las instituciones financieras que operan en múltiples países deben invertir en arquitectura de APIs flexible que pueda adaptarse a requisitos locales específicos.​

Adopción de consumidores más lenta de lo esperado

A pesar del potencial técnico, la adopción de Open Banking por parte de consumidores finales ha sido más lenta de lo pronosticado inicialmente. La razón principal es que muchos servicios construidos sobre Open Banking no han comunicado claramente al mercado los beneficios tangibles. Las discusiones sobre consentimiento, gestión de datos y estándares técnicos no resuenan con consumidores que buscan respuestas simples a problemas financieros específicos.​

Futuro: Convergencia con Inteligencia Artificial

La revolución de GenAI en Open Banking

El potencial transformador de Open Banking se multiplicará significativamente con la integración de Inteligencia Artificial Generativa (GenAI). Aproximadamente el 20% de los bancos minoristas y comerciales ya han implementado soluciones de GenAI o están listos para lanzarlas en el corto plazo.​

La IA aplicada a Open Banking permite:​

  • Asistentes virtuales 24/7: Sistemas conversacionales capaces de proporcionar asesoramiento financiero integral basado en agregación de datos de múltiples instituciones.
  • Modelos personalizados dinámicos: Algoritmos que integran datos de todas las cuentas y servicios del cliente, analizan patrones de comportamiento, simulan escenarios financieros y ofrecen planificación adaptada continuamente.
  • Detección de fraude mejorada: Sistemas de análisis comportamental adaptativo que identifican patrones fraudulentos con precisión dramáticamente superior a métodos tradicionales.
  • Automatización de procesos complejos: Plataformas que automatizan tareas bancarias sofisticadas mejorando significativamente la gobernanza de datos.

Impacto económico proyectado

Los analistas proyectan impactos económicos sustanciales cuando GenAI se integra completamente con Open Banking:​

  • Accenture estima que GenAI podría aumentar los ingresos operativos de los bancos entre 25-40%.
  • McKinsey Global Institute proyecta que GenAI podría generar ingresos adicionales entre 2.8% y 4.7% de los ingresos totales de la industria bancaria global.

El camino hacia una economía financiera abierta

Open Banking representa una transformación fundamental en cómo funcionan los sistemas financieros globales. De un modelo cerrado donde los bancos controlaban acceso a datos y servicios, estamos avanzando hacia un ecosistema donde los consumidores tienen poder sobre su información financiera y pueden compartirla selectivamente para obtener servicios personalizados, más competitivos y mejor adaptados a sus necesidades reales.​

Para instituciones financieras y fintechs, Open Banking no es una amenaza sino una oportunidad para colaborar. Los bancos mantienen posiciones estructurales (licencias, relaciones, confianza del cliente) mientras que las fintechs aportan agilidad tecnológica. Juntos, pueden crear un ecosistema donde la innovación florece, la competencia beneficia a consumidores, y la inclusión financiera avanza significativamente.​

En América Latina específicamente, donde la inclusión financiera sigue siendo un desafío crítico (especialmente en Perú donde aproximadamente 60% de la población adulta carece de acceso a servicios bancarios formales), Open Banking representa una oportunidad histórica para democratizar el acceso a crédito, seguros e inversiones.​

El éxito de estas iniciativas dependerá de la capacidad de reguladores, bancos, fintechs y empresas tecnológicas de colaborar efectivamente, estableciendo estándares de seguridad robustos, protegiendo genuinamente la privacidad del consumidor, y comunicando al mercado beneficios tangibles y contextualizados que demuestren por qué los consumidores deberían adoptar estas nuevas plataformas.​